jueves, 23 de mayo de 2013

EL CAMINO NEOCATECUMENAL - OTRAS PERCEPCIONES (Una estremecedora experiencia)

Hoy nos ha llegado un texto de ex hermano.

El texto es tan explícito y claro que no hace falta más explicaciones.

Nosotros personalmente nos sentimos totalmente identificados con el y pensamos que puede ayudar a abrirle los ojos a otras personas que aún están en el camino o algún Obispo que descubra la realidad el camino y la versión que le cuentan desde el camino.

Bueno no os molestamos más os dejamos con el texto.




EL CAMINO NEOCATECUMENAL-OTRAS PERCEPCIONES


Al principio tenía miedo de comenzar a escribir estoy debo confesar que todavía me agobia un poco la idea de hacerlo, pero creo que es necesario, tanto para mí como para todo aquel al que pueda servirle esta reflexión.

Siento que yo también he sido elegido, así como todos los seres que habitamos este mundo, tal vez no en las magnitudes que me lo presentó el Camino Neocatecúmenal, pero siento que Dios si tiene un plan conmigo que no está dentro del Camino (neocatecúmenal) al cual pertenecí, reglamentariamente por más de diez años. Digo reglamentariamente por que antes de eso estuve de alguna manera involucrado en el Camino a través de conocidos, primos, quienes igualmente también pertenecieron por años a este grupo.

Fui llamado a formar parte del Camino en mi juventud, con unos 21 años, y aunque en principio me negué rotundamente a pertenecer a este grupo, recibí las catequesis de iniciación junto con gente joven obligados por sus padres, quienes en ese momento estaban muy emocionados por el paso que representaba esto.

Debo aclarar que mí negación nunca estuvo basada, en ese entonces, en que me parecieran malas las prácticas del Camino, sino en que consideraba que esto era algo no apropiado para mí, pero que por amor a una mujer acepte rotundamente. Pensaba que  si en el Camino estaban mis suegros y mi cuñada, ademas de mi primo, que esto no seria malo para mi.

Cuando llegué por primera vez a las catequesis de iniciación, lo que vi cambió mi perspectiva acerca del Camino, ya que al menos la mitad de los asistentes eran jóvenes como yo, así que pude hacer empatía con el grupo. En su mayoría todos esos jóvenes eran hijos de catecúmenos y algunos también estaban obligados a recibir las catequesis como dije anteriormente.

Creo que a todos nos pasó lo mismo, de allí nació una amistad que con el paso del tiempo se fue fortificando, llegando en algunos casos  a una relación más formal. Estoy casi seguro de que éste fue uno de los factores que más influyó en nuestra permanecía dentro de la comunidad, nuestra juventud, nuestra complicidad y nuestra rebeldía fueron fundamentales para que no pudiésemos alejarnos del camino, o tal vez debo decir los unos de los otros.

Y aunque sé que dentro de todos nosotros estaba la esperanza de que algo pudiera señalar el mejor camino para nuestras vidas, poco o nada importaban las reglas, mandamientos o la “palabra de Dios”.

Y así pasé más de diez años , con novia,  dentro del Camino algo mal visto, como explicare mas adelante y así todo lo que allí se daba incluido las celebraciones, las convivencias,  eran parte de nuestro noviazgo.

Ahora, que llevo años fuera, siendo padre de familia numerosa, una espinita sigue haciendo que me cuestione sobre mi papel allí dentro, y he sacado algunas conclusiones del comportamiento sectario que allí se vive.

Sí, “sectario” de secta. Más adelante explicaré porque lo digo. Por ahora espero que comiencen a leer esto, como proveniente de alguien que estuvo en el Camino y no le funcionó. Pero me alegra saber que no estoy sólo, casi todos los que conocí en el camino tenían o tuvieron en algún momento de sus vidas, una intención concreta de abandonarlo para siempre. Sí esto puede servir para que des ese paso definitivo, entonces sentiría que lo que he hecho ha servido, aunque más me sentiría tranquilo de saber que has analizado por ti mism@ las circunstancias y has tomado la decisión proveniente de tu pensamiento.

A continuación desarrollaré algunas de las ideas que he estado analizando durante los últimos tres meses.

Y por si queda duda, todavía creo en Dios y en la iglesia Católica, más ya, no más en el Camino Neocatecumenal. Yo creo en un Dios de Misericordia, y no en Dios, que me quiere ver sufrir. Me ha costado mucho, creo que todavía sigo, en parte afectado por esto, aunque me alegra que ya, por lo menos, me haya desprendido de ello.


1-El camino neocatecumenal: ¿una Secta?


Para evitar más escándalo, empezaré por definir por qué digo que es una secta. La definición más práctica de secta, que podemos encontrar en cualquier diccionario señala que es un grupo religioso separado u opuestos a la ortodoxia de determinadas religiones tradicionales.

Con este comentario se puede refutar rápidamente mi primera afirmación y se puede decir que me equivoco, porque el camino Neocatecumenal no está separado de ninguna religión ya que es parte de la Iglesia Católica, ni que mucho menos se opone a las creencias de esta.

Sin embargo, formar grupos que tengan celebraciones aparte de las realizadas por disposición de las parroquias, con ritos totalmente diferentes a los que se utilizan en las celebraciones normales ¿No es separarse?

Y si no se opone a sus ritos, ¿por qué toma parte de la “gran asamblea” (asistentes habituales o de los de domingos), y los obliga a tener celebraciones separadas de la comunidad, que casi nunca pueden compartirse con quienes no formen parte de los catecúmenos?

Esta claro, que por lo menos el Camino no tiene como fin que sus miembros participen del resto de las celebraciones de la Iglesia, ya que si cumple con las del Camino es suficiente. Así se ha creado una gran merma de fieles a las misas de Domingo, por ejemplo, que es una de las celebraciones católica por excelencia.

Siguiendo con el tema de porque una secta, si vemos algunas de las conclusiones del sociólogo alemán Max Weber y del teólogo Ernst Troeltsch, quienes fueron los primeros en definir el concepto “secta”, entre algunas de las características principales de este tipo de agrupaciones está que mientras que la iglesia no demanda cualidades especiales ni pone condiciones para el ingreso en su seno, la pertenencia en el caso de la secta, es voluntaria y debe merecerse.

Esto me recuerda una de las frases que más escuché de los catequistas: “ninguno de ustedes es digno de este camino, pero Dios ha querido que lo conozcan para que encuentren su salvación”.

¿Dios? ¿Seguros que Dios ha querido esto? La verdad no lo creo, porque si fuera así en vez de Jesús decirle a Pedro que edificará su Iglesia sobre la piedra, le hubiera dicho que edificara su Camino Neocatecumenal. Ya es tiempo de dejar de poner palabras en la boca de Dios, él no se equivoca.

Apoyándome de otras referencias filosóficas, sobre secta, está la definición del filosofo alemán Ernst Troeltsch, quien describió la secta como “un grupo pequeño, compuesto principalmente por individuos pobres que, renunciando al mundo, buscan una hermandad personal y directa”. Esta definición hace un año atrás hubiera sido una definición exacta de mi comunidad.

Por su parte el sociólogo británico Bryan Wilson aporta que las sectas ponen mucho énfasis en su exclusividad, en el estricto cumplimiento de las reglas morales y doctrinales, el pensamiento de que componen un grupo elegido en el que se anima a la participación laica, a la expresividad y a la espontaneidad, interpretación literal de la doctrina, recurrencia en los temas del pecado y la redención, insisten en que la salvación no debe buscarse fuera del grupo, sino en el grupo de los elegidos.

Yo mismo he quedado sorprendido de esto, ya que ninguno de ellos se refería al camino neocatecumenal; muchos de ellos lo escribieron antes de que el Camino viera la luz.

Ante algunas acusaciones realizadas antes que las mías, los dirigentes del Camino se defienden de acusaciones de que son una secta diciendo que ellos están siendo perseguidos.


2-La preocupante manipulación psicológica


Algo que me ha preocupado mucho desde que empecé ha investigar las características de las sectas, fueron los mecanismos de manipulación psicológica utilizados por quienes rigen estos grupos para llevar al condicionamiento de sus miembros.
 
Lo primero que me gustaría atacar, es el estratégico “lavado de cerebro”, del cual me siento victima.
 
Al pertenecer a una secta, la persona modifica su comportamiento, producto del constante ataque ideológico y propagandístico, que es un proceso que se da tan sutilmente que el sujeto mismo apenas y lo percibe. Muchas veces este proceso puede ser definido como una “conversión”, pero piensen en que tanto esa conversión puede ser verdadera si es producto de un constante lavado de cerebro y al experimentarla la persona ni siquiera se siente satisfecha consigo misma. A mi parecer la conversión debería ser un proceso espontáneo, algo que nazca de la persona y fluya con naturalidad, no el resultado de una serie de presiones por parte de gente que dice saber cuál es el plan de Dios para con cada uno de nosotros. Gente que igual que nosotros a duras penas puede manejar su propia vida y la de sus familias.
 
Además, ¿tiene igual validez la conversión de una persona que se da cuenta que necesita dar un cambio radical a su vida a través de Dios que la de alguien que obligado e infeliz accede a cumplir las ordenes de un grupo de personas? ¿Y al terminar el Camino será esa persona capaz de decir con todo su corazón y con todo su espíritu, que ha alcanzado la gracia divina y la felicidad absoluta?
 
¿Por qué se debe estar sujeto a lo que un grupúsculo de personas quiere?¿No parece esto extraño? Irónicamente mucha de la gente que conocí en el Camino son las más rebeldes con que me he podido topar en la vida, pero son dóciles a las palabras del catequista.
 
Ellos (los catequistas) son escogidos muy cuidadosamente, no cualquiera puede serlo. Deben ser personas diligentes, algo agradables, pero que sobre todo sepan hablar. La práctica les da el resto. Así aprenden a convencer, mientras ellos son convencidos.
 
Es como una gran cadena. En el Camino se te enseña a admirar a Kiko, según ellos él es lo máximo, porque se le ocurrió la idea brillante de crear el camino catecúmenal mientras había abandonado sus riquezas y se había ido a vivir con los pobres. Casi la historia de un Santo: un pagano que encontró en los pobres la riqueza de un Camino que Dios tenía preparado para la humanidad. ¡Por Dios!
“Como Kiko es lo más parecido a un santo viviente, y yo quiero la santidad, y yo puedo ser como Kiko, entonces debo imitarlo”, así piensan los catecúmenos, o por lo menos los más adiestrados en la doctrina.
 
Y este tal Kiko Arguello se las sabe todas, y los tiene a todos a sus pies. Invita a catequistas a convivencias cada año, para que estos les “traspasen” al resto de los fieles sus enseñanzas, basadas completamente en lo que “el señor” le ha iluminado durante este tiempo.
 
En realidad las convivencias de traspaso son un total reflejo de las convivencias con Kiko, y se le cita en su totalidad. Estas citas van pasando de catequista a catequista hasta que termina en los catecúmenos sin rango. Todo basado en la interpretación de Kiko de los evangelios y su puntos de vista.
 
A veces pienso que esta cadena es lo más peligroso de todo; quizás existen buenas intenciones de los catequistas; quizás el mismo Kiko es victima de alguien; quizás hay algo más profundo detrás de todo esto que aún no he podido percibir, y no hablo del Espíritu Santo y su caridad, de la cual carecen muchos, pero de algo de lo cual estoy totalmente seguro es que en esas convivencias se nos enseñó que esa es la última palabra y no hay otra, y que no nos queda más que “obedecer”. Y así se hace.
 
Casi siempre que se trae el mensaje se te alienta, porque es algo que te hará sentir bien, y en teoría va a ser así. Claro, hasta cierto punto. La experiencia de las convivencias es muy agradable porque es el ideal de muchos de nosotros, que agobiados con nuestras vidas exigimos un respiro a todo lo que nos hace sufrir: nuestro trabajo, los estudios, la familia, la falta de compañía, etc., por lo que se pone en movimiento algo en la persona que se siente envuelta muy intensamente, además de que se apela a algo muy presente en cada uno de nosotros: la necesidad de lo sagrado y la búsqueda del significado de nuestras vidas.
 
Se te hace acompañar de tus “hermanos”, gente a la que has estado próxima durante el último año, con quienes has compartido y has vivido y te sientes apegado.
 
Cuando participas del camino neocatecumenal se te hace fácil poder confiar en tus “hermanos y hermanas”, pero lo que no se sabe es que este es uno de los procesos mentales utilizados en psicoterapia como efecto tranquilizante. Es a veces incomprensible cómo hay quienes se sienten mejor y es capaz de afrontar los problemas de la vida con más serenidad y confianza cuando están con sus hermanos de comunidad, sin embargo les es difícil hablar con su esposo, padres, familiares, jefes, y amigos en la intimidad.
 
Lo que pasa es que según los psicólogos, un grupo de personas que conformen una organización, se convierte en la inconsciente proyección de la tranquilizadora figura padre/madre, esto es lo que se utiliza en las llamadas terapias de grupo, que aunque ha de costar mucho esfuerzo psicológico para los participantes, es un estimulante para enfrentar los miedos de cada uno y aprender a aceptarlos más que a superarlos.
 
Por eso, aunque al principio puede que haya mucho recelo por develar detalles íntimos de la vida personal, al transcurrir el tiempo, ese recelo va desvaneciendo y es muy común ver que durante “las peticiones” al igual que durante “el eco” cualquiera recé en voz alta, libremente, expresando sus sentimientos, abriéndose cada vez más a la sinceridad.
 
Esto, entiendo, viene a ser una preparación para rituales futuros. Pero no queda allí. Esta liberación aparente puede a la larga ser muy perjudicial, ya que esto crea una dependencia ambigua entre todos los miembros de una Comunidad, ya que como cada vez se van conociendo los detalles más privados y ocultos de sus vidas, esto se convierte en algo que los ata más al Camino y les impide partir en el momento en que no se sientan a gusto en él, porque no encuentran a Dios allí.
Esta convicción de que la salvación se encuentra sólo en el Camino y en ningún otro lugar, es reforzada con la trillada tesis de los catequistas, de que al salir del Camino uno está fuera de la Iglesia. Ante cualquier intento de abandono la persuasión actúa en el acto, y comienzan a chantajearte a través de todo lo “malo” que ya conocen de ti, argumentando que “fuera del Camino estarás en la muerte porque este es el camino que el Señor ha elegido para ti”.
 
Al final el daño psíquico es tal que la gente queda convencida de que el Camino es su religión, y al abandonarlo usualmente abandonan también todas sus conexiones con la Iglesia Católica. Este, en particular, es mi caso.
 
Pero una vez dentro es poco lo que se puede hacer. Se está rodeado todo el tiempo de gente que pareciera muy ansiosa de ver tropezar al hermano. Sin quererlo la comunidad ejerce una gran presión sobre sus miembros, que están sujetos a una “disciplina de hierro” en el Camino.

 
Muchas veces serán los propios catecúmenos, o más aún tus propios hermanos, los que estarán ansiosos de verte caer. Sin embargo se crea una gran indiferencia contra los que no forman parte en el Camino.

Quien no pertenece al camino entonces es tajantemente excluido. Increíblemente entre la gente excluida se cuentan incluso cristianos que son parte de la Iglesia, gente activa en otros movimientos católicos, e incluso se desprecia a Católicos que van a la misa de los domingos.

 
Esto, irónicamente, demuestra lo capaces que son los catecúmenos de amar a su enemigo en la dimensión de la cruz. La bendita y tan falsa cruz que te hacen seguir, que no es más que el reflejo de tus más profundos miedos. Algo con lo que puede controlarte.
 
La manipulación llega hasta tal punto que en algunas ocasiones, los miembros de la comunidad, son prácticamente empujados a decir todo lo que piensan delante de sus propios familiares y amigos, causándoles serios daños emocionales. Y como si fuera poco, el catequista suele interrogar cada vez más a fondo, para conocer todos los secretos que la persona guarde.
 
La amenaza psicológica más recurrente en el catecumenado, que es a la vez su estrategia más fuerte para mantenerte dentro era: “cuando salgas te convertirás en una persona infeliz, y ya no podrás decir que no conoces el catecumenado”.
 
Los catequistas manipulan la conciencia de las personas, bajándoles la autoestima a niveles enfermizos, imponen la "voluntad de Dios" como si ellos fuesen los únicos poseedores de la verdad. Pero... y si Dios quiere otra cosa para mí? ¿Cuándo me voy a dar cuenta si estoy todo el tiempo con ellos?
 
Dentro del camino se pierde la voluntad, hay que estar sujeto a la voluntad de los catequistas, que parecen fundamentalistas radicales. recordándome en algunos casos a radicales islámicos pero en el seno de la iglesia católica  no por alentaciones violentas, que no se dan pero si por las maneras y los postulados.


3-Compromiso esclavizante


Aunque desde el principio del Camino no es evidente, con el paso del tiempo comienza a hacerse obvio el control casi imperceptible que se ejerce sobre las personas y lo que hacen, obligándolos a relacionarse casi únicamente con lo que se hace en la comunidad.
 
Inicialmente, tomar parte en dos celebraciones semanales y sus respectivas preparaciones parece algo ligero, pero poco a poco, se insta al individuo a cumplir con el llamado “trípode” (celebración, eucaristía y convivencia), que es, según ellos, el pilar de su conversión. Ocasionalmente se suman a esto las convivencias de traspasos, las de pasos, las visitas (de los catequistas), los anuncios.
 
Y eso no es todo, ya que se te dice que no debes poner primero tus “intereses” y segundo tus compromiso con el Camino, es decir que no valen clases, turnos de trabajo, familia, e incluso otras actividades de la misma iglesia, ante tu compromiso con tu comunidad.
 
Poco a poco, vas cambiando de hábitos y actitudes, lo que antes criticabas de otras religiones, ahora te parece fantástico; lentamente adoptas un lenguaje en particular, tanto oral como corporal. Te son familiares los términos “la palabra”, “la bolsa”, “el Catequista”, “Kiko y Carmen”, “la celebración”, “el trípode”, “la convivencia”, “obediencia”, “los laúdes”, “el Señor proveerá”, “monición”, “el eco (de la palabra)”, “preparación”, “soberbio(a)”, “escándalo”, “los responsables”, “salmista”, “tu cruz”.
 
Pero el lenguaje es sólo un detalle, muchas cosas de tu vida, sobre todo tus hábitos van cambiando de manera que sean sólo las cosas del Camino las que produzcan armonía con el espíritu, para que el Camino sea la única cosa que traiga satisfacción a tu vida. Además al cumplir con los deberes del Camino, las personas son obligadas a no tener que pensar más en su situación, y cuando manifiesten sus dudas estarán tan ocupados “preparando”, “celebrando la palabra”, “haciendo el pan”, o “arreglando las flores”, que apenas y tendrá un tiempo para su propio arreglo personal.
 
Pero de darse el caso, de que las dudas surjan incluso en plena celebración, la respuesta más acertada que tendrán los catequistas será que hable de ello con los catequistas mayores; y como los catequistas conocen muy bien cual ha sido la vida pecadora de cada uno, simplemente utilizará eso para condicionarte, y al final estarás convencid@ de que no hay nada mejor vivir que el Camino. Llegará el momento en que uno estará totalmente convencido de que los catequistas nunca se equivocan y que de verdad son los únicos a los que Dios quiere darles la verdad.


4-Conducta controladora dispar a la de la iglesia


Una de las cosas más serias que sucede dentro del Camino Neocatecumenal, es el control sobre las emociones de la persona, utilizando como base los apartados más vulnerables de cada persona como la culpabilidad y el temor.

Hay también un latente sentido de humillación para con las personas. Siempre se habla de que uno es la peor basura que el mundo puede haber dado, y tal vez eso puede ser cierto, en alguna medida, pero ¿quién ha dicho que somos los únicos? Nuestra historia es la misma historia de nuestra familia, nuestros amigos y nuestros vecinos que no están en el Camino. No sería justo para nosotros mismos, decir que nosotros somos más basura que ellos ¿Por qué? Porque nosotros conocimos el Camino y ellos no? O es que se nos olvida que estamos frente a un Dios misericordioso, que es conciente de eso...que sabe todo lo que pasó y lo que pasará. Él nos ama seamos basura, o seamos pureza.

Ya está bien, de que sólo los catequistas puedan separar la basura, cuando al final, te das cuenta que comienzas a ser una verdadera basura cuando entras a este bendito Camino, porque pareciera que en realidad eso es lo que ellos quieren, que te conviertas en eso. Como es posible que uno de las frases alentadoras favoritas de muchos neocatecumenales sea decir que: “la comunidad comienza a crecer cuando empiezan a pelearse entre ustedes y se arrojan toda la basura que llevan dentro”.

¿Es este un camino de Dios? Cuando se nos ha dicho todo el tiempo que Dios es amor. La misma Iglesia Católica nos recuerda que por encima de todo estamos salvados por el amor de Dios y esto nos hace sentir la alegría de su misericordia incluso en el medio de nuestras miserias. Pero muchas cosas en el Camino son muy diferentes de lo que la Iglesia predica.

Prácticamente se inculca a los miembros de la Comunidad que se forma parte de una élite privilegiada en la iglesia, destinada a traer la salvación individual (en esto se hace mucho énfasis: tú no puedes salvar a nadie más).

“El Señor te ha elegido y te ha invitado a ti y no a nadie más”, escuche decir muchas veces. Aquí es donde me doy cuenta que a pesar de ser un plan con un fin tan incongruente a lo que debemos esperar de la Iglesia, es una idea bien maquinada. Frases como la anterior y otras similares permiten a la gente creer que ellos han sido “especialmente elegidos”, con lo cual inconscientemente se satisface su propio frustrado sentido de sí mismo.

Una de las cosas más perturbantes, es la interpretación que le dan a los pasajes de la Biblia, ya que se lo toman muy a pecho. En el caso de lo de: “Les aseguro que cualquiera que por causa del reino de Dios haya dejado casa, o esposa, o hermanos, o padres, o hijos, recibirá mucho más en este mundo, y el mundo venidero recibirá la vida eterna”(Lucas 18, 29-30), la premisa era “si tu pareja se interpone en tu camino ¡ desprécialo ! Y lo mismo con cualquiera de tu familia: hijos, hermanos, padres o cualquiera que quiera mantenerte separado del Camino.

Quienes dirigen el Camino Neocatecumenal se jactan diciendo que tienen millones y millones de seguidores y esto es verdad. Aunque de repente, nunca nadie ha mencionado el hecho de que el número de gente que lo ha dejado, es al menos cinco veces el número de miembros. ¡En que me baso para decir esto? Simple probabilidad, recuerdo mi primera comunidad, era algo más de 30 personas de las que en cinco años escasamente había 8.

Lo peor del abandono es la condición de sufrimiento que se adquiere. Quienes lo hacen, a menudo no tienen ya más fe. Esto es contradictorio, por que cuando estás dentro te hacen sentir mal porque no tienes fe, sin embargo al salir buscas apartare a toda costa de ello. Eso no está nada bien para restablecer nuestra relación con Dios.

Es vergonzoso, que los que alguna vez seguimos el Camino, al salir lleguemos incluso a maldecirlo, sin embargo al analizar la realidad de lo que vivimos no nos queda otra.

Pero para mi resulta más vergonzoso que después de años y años y años de Camino, algunas comunidades todavía sean tan hipócritas, arrogantes, egoístas, descuidados, frívolos, soberbios, y sean más pecadores que gente que nunca a oído hablar de la fe católica.

Siembran el odio, crean situaciones desagradables y para salir de ellas dicen mentiras de todo tipo; hay peleas, se insultan, se juzgan, se señalan, sin ni siquiera mirar su propia verdad.

Es difícil que en ambientes como este pueda nacer el “hombre nuevo”, del que tanto hablan, y al mismo tiempo resulta más fácil que sucedan desequilibrios afectivos y desviaciones espirituales que llevan a abrazar otras sectas, como ocurre muy a menudo, o que en el peor de los casos se vuelvan ateos. Lo quiero dejar claro con esto, es que apoyo 100% la doctrina católica, y estoy de acuerdo con ella en muchas cosas, aunque no en otras


5-Al estilo catecúmeno


Otra situación característica de catecumenales es su obsesivo celo por las cosas del Camino. Las celebraciones que realizan las comunidades, no tienen como base esencial los templos de la Iglesia. La cruz, el atril, la Biblia, los manteles, el pan, el vino y absolutamente todo lo que se use, debe estar firmado por “Kiko”. Incluso los salmos, y algunas canciones que algunos pasajes de la Biblia y poemas de teólogos le han inspirado al Arguello, llevan su propio ritmo, y este es inviolable.


Por esto, para cualquiera que haya estado habituado a vivir de esta de esta manera durante años encuentra increíblemente difícil separarla de la relación que puede haber establecido con Dios.

Se crea una dependencia psicológica que provoca que la persona pierda sus facultades críticas y lógicas de lo que lo hacen ser un verdadero cristiano. Vemos como poco a poco nuestra fe se va perdiendo en ese mundo de incongruencias que no es difícil dejar de ver como lo más acertado que hemos hecho en nuestra vida.

Aunque muchos, cuando estamos dentro, sentimos que esto no es lo que Dios quiere para con nosotros y nos atrevemos a criticar el camino, existe muy poco coraje para volver a tomar las riendas de nuestra vida y abandonarlo, porque no es casi imposible dejar de identificar el camino con la Iglesia, y como señalaba el filosofo Betrand Rusell a principios del siglo pasado, los seres humanos necesitamos sentir la protección de un hermano mayor sobre nuestras cabezas. Apropiadamente muchos de nosotros buscamos esa protección en la Iglesia.
 
Afortunadamente también, la Iglesia es un lugar que es mucho más espacioso y libre que la iglesia que Kiko nos a presentado, y está dispuesta a aceptarnos tal y como somos sin pedirnos mucho más que fidelidad a cambio.
 
Un claro ejemplo del control que el camino ejerce sobre sus miembros, es durante la celebración de la Semana Santa, la celebración más memorable para los cristianos. Aquí, a pesar de que la Iglesia celebra sus propias celebraciones, el Camino exige a sus miembros como prioridad asistir a las organizadas por ellos. Al menos son unas celebraciones muy bonitas, pero que tienen un trasfondo de exclusivismo.
 
Este “triduo pascual” culmina con la celebración de la Vigilia Pascual, celebrada en la madrugada después de la vigilia que celebra la iglesia, y que en esencia es litúrgicamente igual.
 
Muy pocos catecúmenos participan de ambas vigilias, porque físicamente seria muy agotador, lo que significa que en la primera vigilia, que corresponde a la celebración de la comunidad habrá un gran ausentismo por la no-asistencia de los catecúmenos. E incluso al día siguiente cuando la iglesia celebra la misa del domingo de Pascua, los catecúmenos no podrán asistir porque se encuentran muy agotados por la celebración anterior, e incluso en el preciso momento en que se celebre la misa del Domingo de Pascuas, algunos aún estarán celebrando.


6-Si el camino no es para ti, pues no lo es


Criticar el Camino estando en el Camino no es nada fácil. Cuando pertenecí a una comunidad, donde se puede decir que yo era uno de los más rebeldes en cuestión de compromisos con Dios a través de él, muchas veces quise cuestionarlo, pero los neocatecumenales reaccionaban violentamente cuando alguien lo hace. La primera reacción de los catequistas es evitar y evadir respuestas, sino pueden con eso, Kiko les ha dado ya un par de argumentos para que enfrenten a gente como yo. Lo único malo es que ya los usaron todos y lastimosamente me los aprendí.

 
Una de las primeras cosas que te dirán cuando cuestionas la veracidad del Camino es que los Neocatecumenales son perseguidos y que el camino tiene muchos enemigos. Incluso se llega a decir que el demonio está en todas partes. Cada vez que quedaba una silla vacía en alguna reunión decían: “allí está sentado el demonio”. ¡Qué martirio!
 
Otra característica importante que se resalta de las sectas es precisamente esto, tiene la necesidad de crear un enemigo externo contra quien puedan fijar sus miedos y ansiedades individuales. ¿Ves ante que peligro estaban?
 
Los neocatecumenales: "se creen mejores que los otros", "imponen su presencia como la sola vía de vivificar la Iglesia", "dividen las comunidades parroquiales con dureza, incomprensiones y sospechas”.


7-La marcha


Muchos catecúmenos pierden su identidad y su vida en el Camino al no ocuparse en sí mismos durante años con muchas actividades, preparaciones, celebraciones, pasando a través de diferentes pasos o algo más.
 
Lo peor es que esto se hace pensando en que llevando a cabo estas acciones, la conversión llegará. Pero, señores, la conversión llega cuando uno quiera y no necesitas llevar a cabo tantos sacrificios para darte cuenta, sólo es cuestión de aceptar a Dios y él sabrá cómo guiarte.

La gente parece tan embobada con la idea de la vida eterna que ofrece el Camino que deja pasar por alto todos estos detalles. Pero estoy seguro que hay algo oculto detrás de todo esto, los hechos hablan por sí solos. ¿Por qué los textos y las enseñanzas de Kiko están rigurosamente mantenidos en secreto? ¿Por qué se generan tantas criticas contra el Camino? ¿Acaso han considerado alguna vez que las críticas pueden sólo haber sido inspiradas por amor a la verdad y no hechas por los demonios perseguidores que tienen rencor hacia ellos? Y si conocen tanto la bondad que tiene la palabra de Dios ¿Por qué nunca han visto la respuesta de Dios en su propia escritura?


"Porque yo quiero amor, no sacrificio,
Conocimiento de Dios, más que holocaustos".
Óseas 6:6
Página 1305 de la Biblia de Jerusalén



Primero hay que dejar algo claro. No considero que el Neocatecumenal, sea una mala idea de vía para llegar a alcanzar una vida que agrade a Dios, sino que su objetivo esta desvirtuado, en otras palabras está mal encaminado. Pero no por culpa de quienes entran a él buscando una forma de acercarse a Dios, sino por culpa de sus dirigentes que no ofrecen ni paz interior ni un acercamiento a las cosas de Dios, basándose únicamente en el argumento de que ese no es un camino fácil, a tal punto que pareciera que muchas de las acciones las realizan con plena intención, planeamiento y alevosía para hacer sufrir a los miembros del grupo. Sin embargo hacer esto no les cuesta nada, porque fácilmente pueden romper familias y causar problemas económicos a hogares que apenas y alcanzan cierta estabilidad.
 
Yo, basándome en mi experiencia personal, vi con mis ojos como destruyen matrimonios. El caso más claro que puedo citar es el de la hija de uno de los catequistas más importantes de mi parroquia, y por que no, el más pesado y ruin, quien junto a su esposa(...), querían llevar el control de todo lo que sucedía allí como si el grupo fuera suyo. Ellos casaron a su hija con el primer tipo que les llevó a la casa, sin percatarse de que este era de un estatus social algo inferior al de ella. En menos de dos años la pareja se había disuelto, y las razones que los llevaron a eso fueron todas del camino.


8-La cruz


Uno de los ritos del Camino, más conocido como el es esencial para darse cuenta de las maniobras que vendrán después. Durante este rito, hay un momento en el que puede a veces tomar un nivel dramático para la persona que lo experimenta. Es cuando cada "hermano" y "hermana" tiene que decir, enfrente de toda la comunidad y sus catequistas, cual es su cruz personal. Este momento está marcado por emociones muy poderosas porque hacer saber su cruz -a menudo confesando con lágrimas y con gran resistencia interna- tiene un efecto catártico y liberador. Mucha gente mentirá en este punto porque se sienten avergonzados o embarazados. Es el primer paso fuerte en el Camino y mucha gente abandona. Pero los catequistas reafirman a los que quedan, "no todos son llamados para ser sal y luz. El señor te ha invitado". ®

 
Un aparentemente fuerte "yo" se ha creado. Se toma una identidad de salvado que es un poco especial -ser el que es llamado a una misión para la iglesia cuya oportunidad de ser llamados no es dada a todos. Sutilmente, la camisa empieza a apretar. Aprieta incluso más para esas gentes que tienen un "yo" que es débil y poco estructurado. Esta gente, después de pocos años, es incapaz de encontrar nada fuera del Camino ni nadie más que sus "hermanos y hermanas" en su comunidad.
 
Nunca se me olvidará como persuadían a la gente para decirle qué era o qué no era su cruz.
 
Un año después del primer escrutinio, en general, se afronta el "shemá" (escucha Israel). Aquí llevan a casa la idea de que una señal es necesaria y que esto es privarse de bienes, lo cual creaba verdaderas tensiones emocionales en muchas personas, pudiendo desequilibrar a algunos, que no es que sufrieran este desequilibrio por el camino, pero si, que si no se está completamente centrado se puede dar algún problema.


9-El Kiko de la discordia


Kiko Arguello, es un personaje que siempre me ha llamado la atención. Es digno de admirar, pero no por lo que representa para el camino, sino con lo que ha hecho con él. ¿Cómo es posible que un hombre tenga tanto poder de convocatoria entre las masas? Para muchos porque es el elegido de Dios, pero no es tan simple

Basta sólo con preguntarse por qué, si este es un camino inspirado por Jesucristo, el Sr. Kiko sigue al mando, y tiene el control sobre lo que se hace en el Camino, porque sólo Kiko y sus catequistas tienen autoridad reinante, no se delega en la propia iglesia, ya que ha crecido tanto

Él y sólo él es culpable de que esto se le haya salido de las manos, porque él y sólo él ha creado las reglas de este juego. Nosotros, sin embargo, prácticamente hemos caído en una trampa, de las cual aunque sabemos como salir, se nos han cortado los pies para poder hacerlo. Muchos de los que estuvimos involucrados en el Camino, seguramente hemos llegado a pensar que hemos sido elegidos para ser la sal y la luz de la Iglesia para el mundo, sin embargo se ha alterado nuestro concepto de iglesia.
 
Además tampoco estoy muy seguro de que el fin del Camino Neocatecumenal sea del todo cierto. A los miembros de las comunidades neocatecumenales se les promete la salvación sólo por aceptar y cumplir el Camino como estilo de vida que es único y para unos pocos. Esto, de salida, es algo muy cuestionable porque que hasta donde sé es Dios y no Kiko, el único que puede determinar que acciones son la que llevan a la salvación, y aunque el mismo Vaticano apruebe los estatutos del Camino no lo hace una vía óptima para llegar a pasar a la eternidad y permanecer con Dios.
 
Kiko Argüello (o Francisco Argüello), inicio dando cursillos en las barracas de Madrid, después de haber querido ser comunista y artista bohemia,contando hoy en día con más de 15 mil comunidades, en más de 100 países. Un logro impresionante, del que incluso ha hecho que la guitarra, suene a su manera.
 
Como si fuera poco los neocatecumenales tienen sus propios seminarios, que toman el nombre de Redemptoris Mater. Al salir de allí, los sacerdotes son enviados al extranjero, y aceptan de buen grado ir en misión de parte del Movimiento. ¿De donde saca el poder para hacer eso?. mas adelante citaremos algo interesante.


10-Y qué de Carmen...????


¿Quedó claro quién es aquella mujer que siempre acompaña a Kiko? Pues lo único que se sabe es  que su nombre completo es Carmen Hernández, que estaba de misionera buscando voluntarios para evangelizar a los mineros bolivianos, cuando se encontró con Kiko en las barracas y quedó tan impresionada que lo acompaña hasta hoy día. ¿Ese es un comportamiento normal, cuando el mismo Jesucristo ha  dejado dicho que no sigan hombres?

 
Carmen, es química de profesión, fue profesora y tiene además un título universitario en teología, se ordenó religiosa y después de algunos años pidió poder obtener los votos solemnes, pero nunca los obtuvo. Algunos dicen que no fue admitida a hacer los votos solemnes por ser incapaz de obedecer, pero no me consta.
 
Uno de sus escritores favoritos es el biblista Javier León Dufour (que ahora es ley en el Camino).


11- El mito Kiko-Carmen


Otro punto que quiero resaltar del camino catecumenal, que incluso me resulta gracioso comentar, pero que es totalmente serio, es sobre el ingenuo fanatismo de las comunidades en el casi sobre-humano, poder carismático que se le atribuye a Kiko y Carmen. Llegando al punto de que si Jesús está a la derecha del Padre,  Carmen y Kiko se encuentran susurrándole a los oídos, siendo esta la percepción para muchos de los catecumenos.

 
Varías veces en las instrucciones los catequistas recomiendan no revelar a ningún extraño lo que han escuchado. Sin embargo Jesús exhortó a anunciar su mensaje incluso sobre los techos de las casas. ¿Por que Kiko no presenta sus predicaciones, publicándolas para que el público sepa, con conocimiento de causa, quién es, qué cosa predica o qué quiere finalmente con sus denominadas revelaciones y las de Carmen? ¿Por qué las reuniones son  casi siempre de noche y en pequeños grupos? ¿Por que aquellas instrucciones están reservadas sólo a los catequistas? Seguro que muchos catequistas  tendrán respuesta a esto. Lo más seguro que dirían es: “Calla y obedece”.
 
Sin embargo, yo les propongo mi propia respuesta. La más lógica, que de seguro mucha gente que está en el Camino la ha pensado y tiene miedo incluso de susurrarla en su pensamiento. Kiko y Carmen temen las reacciones del mundo católico, especialmente de los fieles más conocedores de la teología, ya se han dado atisbo contra la curia episcopal, que llevan estudiando el caso, varios años.
 
Kiko y Carmen temen particularmente que la jerarquía de la Iglesia descubra el fondo doctrinal de su Camino, que la Iglesia los desacredite ante la opinión pública, que los condene, que les impida efectuar el plan de fundar una nueva Iglesia, como debe suceder algún día de estos.
 
Es ridículo escuchar a los catequistas cuando hablan de Kiko, que parece que no hablan de un hombre normal, como si perteneciera a una categoría especial de hombres: "los que son capaces de discernir", y estoy seguro que en su vida, lo verán en persona.


12-Intuicionismo Begson


Leyendo una de las biografías de Kiko, me di cuenta que su retorno hacia la iglesia católica, que fue cuando se le ocurrió la brillante idea del Camino, estuvo motivada por las lecturas que hizo del filosofo y escritor francés Henri Bergson. Inocentemente el nombre de Bergson me llamó la atención, y cuando investigué sobre él descubrí que una de las principales ideas que él impulsaba se basaba en la importancia de la intuición sobre el intelecto.

 
En concreto, decía que la intuición es más profunda que la propia razón. Esto definitivamente se enseña a voces dentro del camino : “no pienses”. ¿Pero como esperan que las personas con un grado mínimo de inteligencia no pensemos? Bergson habrá recibido muy orgulloso su premio Nobel, pero yo “intuitivamente” no puedo dejar de pensar y menos de criticar la tortura por la que me hicieron pasar.


13-Un problema de fondo...pero no de forma


Cuando uno se pregunta, por qué con todos estos antecedentes el camino sigue en pie, la respuesta es fácil, esta agrupación es una fuente importante de vocaciones, en un momento malo para la iglesia, que atraviesa por una gran crisis de fe. Además es un grupo fuerte y bien organizado, con tan grandes influencias que seguramente participarán de decisiones importantes en el Vaticano, y ojalá que por el bien de la Iglesia Católica esto no suceda.
 
A pesar de esto el Camino no está bendito dentro del Vaticano. Así como hay muchos que lo apoyan, hay muchos que lo repudian y están pendientes de no darle alas a Kiko, porque saben que si las obtiene no volverá nunca a descender del cielo.
 
Irónicamente, el enemigo más grande que tiene el Camino y que todavía hace que el Vaticano lo vea con resentimiento es el mismo Camino. Porque el problema de base del camino, consiste en el hecho de que el Camino Neocatecumenal no se inspira directamente en el Catecismo de la Iglesia Católica y la iglesia basa claramente todos sus comportamientos en este documento.
 
Incluso el Camino carece de textos específicos que puedan ser consultados para que sean estudiados por las autoridades del Vaticano, ya que los catequistas del Camino sólo utilizan fotocopias y grabaciones de conferencias de Kiko Argüello y Carmen Hernández, fundador y fundadora del Movimiento.
 
Lo único más completo que se conoce y que es casi imposible de consultar por los que no fuimos privilegiados, es un par de copias que se llaman "Orientaciones para los equipos de catequistas para la fase de conversión", un texto que reproduce algunas conferencias mantenidas por Kiko en 1972, para los catequistas de Madrid, y "Orientaciones a los equipos de catequistas para la iniciación a la oración", que aporta en cassettes, otras catequesis de Kiko y Carmen realizadas entre 1977 y 1981.
 
Y porqué si no es malo existe tanto hermetismo con esta información, porque se mantiene todo en secreto y no se realiza una difusión masiva de la palabra neocatecumenal, ya que es un contenido sumamente beneficioso para el crecimiento espiritual de cada uno de los seres humanos que habitan el planeta.

Algo que se me ocurre puede ser que una vez que el contenido de esas catequesis se dé a conocer quedará en evidencia que el movimiento está lejos de la doctrina oficial católica, lo que haría más difícil alguna aprobación.
 
No es algo que en el momento deja de qué pensar, pero mientras duran las catequesis nunca se habla de la adhesión posible de los participantes a un nuevo grupo, más bien sucede todo lo contrario, las catequesis son dirigidas sin que se haga nunca alusión al Camino, como si no existiese hasta que es verdaderamente necesario.

Extraño, también es el hecho de que quienes llevan el poder en las asambleas catecúmenas no es ni siquiera el sacerdote, sino los catequistas. En muchos casos los sacerdotes tienen el mismo rango que ocupa el resto de la comunidad.


14-Sexualidad en el camino


Aunque mi duración en el camino no fue hasta más allá de lo que me hubiera gustado conocer, pude notar que en el interior del movimiento, se predica una moral muy rígida respecto de la sexualidad.

 
Se les prohíbe a las parejas utilizar cualquier método anticonceptivo. Ni siquiera el método del ritmo, que es el que promueve la Iglesia Católica, porque los neocatecumenales creen que se debe confiar totalmente en la voluntad de Dios.
 
Aquí no valen los peligros prenatales, las anomalías en el embarazo o un estado de gravedad de la madre, cada una debe dejar que Dios actué, siempre con una disposición de “estar abierta a la vida”.
 
Si no tienes pareja, te obligan a buscarla; si tienes una por mucho tiempo te obligan a casarte; si pasas mucho tiempo casado sin lograr tener familia te juzgan y te dicen que no te sometes a la voluntad de Dios; y si pueden hacen uniones arregladas de parejas, sin importar que exista amor entre la pareja. No es extraño ver casamientos con parejas de menos de tres meses de conocerse.
 
Además, no es visto con buenos ojos que escojas una pareja fuera del camino, te obligan a optar por el matrimonio o la vida consagrada, es decir que te quieren sacerdote o padre de familia, no existe un punto intermedio.
 
Ya dentro, a muchos se les engaña con el mismo cuento con que atraparon a sus parejas, pero una vez dentro se les comienza a presionar y acosar de una forma tan reiterativa, que sólo podrá terminarse el día que los dos se juren amor eterno ante el altar.
 
Por esto con el pasar de los años, el Camino se convierte en un grupo sólido, donde las personas se convierten en endogámicas, es decir que sólo se casan con otros miembros del grupo.
 
Si alguno intentó que su pareja se uniera al grupo y no tuvo éxito, es obligado a abandonar a su pareja, o a abandonar el Camino.
 
En el segundo escrutinio, cuando se les pide que dispongan de los ídolos en sus vidas, quien sabe si alguien en el neocatecumenado habrá alguna vez sospechado que uno de sus ídolos pueda ser justamente ¡el Camino mismo!
 
Pero el martirio de las parejas no es menor que el de los solteros, ya que en el caso de que sólo uno de los esposos esté dentro del Camino (que es algo que ocurre más a menudo de lo que se piensa), el grupo se vuelve un obstáculo que puede incluso propiciar el distanciamiento.
 
¿Cómo se sentirá un esposo o una esposa que al volver a su casa por la noche, cansado del trabajo, se da cuenta de que nadie estaría en casa, porque su mujer está preparando la palabra, y sus hijos en la celebración. Hay dos respuestas para esto: si es catecúmeno seguro se sentirá dichoso, pero si no lo es seguro buscará el calor del hogar en otra parte, al ver que su familia ha dejado de serlo.
 
Se dejan muchas amistades. Supuestamente por que no conviene relacionarse con la gente que no tiene el camino como modelo de vida. Pareciera que se odia todo lo que no lleve el sello del camino. Y eso que se habla mucho del amor al prójimo (¿a quién se referirán con esto?)
 
Pero ante esto, yo me pregunto ¿y qué hay de Kiko? ¿Por qué no se casó, por qué no tuvo hijos, si es un laico más, por qué no optó por el sacerdocio si dice vivir la voluntad de Dios? Claro, con el sacerdocio, uno renuncia a muchas cosas, y él como todo un tipo acomodado, le gusta el lujo y la vida burguesa, y todo a costa del camino. Por que no tiene un trabajo que le devengue ingresos, o su único trabajo es seguir esa manipulación con los que inocentemente buscan en el camino una solución a sus problemas.


15-El Dinero


No sé si sucede en todas las comunidades, pero en las comunidades de áreas pobres como a la que pertenecí, el dinero juega un papel muy importante

Como organización, una comunidad incurre en gastos de todo tipo, los que lógicamente tienen que asumir los miembros de la comunidad.
 
Esto se hace secretamente, ya que se pasa una bolsa donde cada persona deposita a su criterio y según sus posibilidades su colaboración. Sin embargo muchas veces la gente está pendiente hasta de quién hecha algo en la bolsa y quién no. Y peor, en cualquier momento esas personas recriminaran a ese otro su falta de cooperación. No en los mejores términos por supuesto.
 
Lo peor es que así como se exige una obediencia ciega a los catequistas, a simple vista uno puede ver que en ellos existe cierta falsedad entre lo que se predicaba y lo que se hacía. Aún continúan en eso.
 
En las comunidades pobres, como a la que yo pertenecía te obligaban a dar todo, sin embargo en los encuentros anuales donde se reunían varias comunidades del país, retumbaban y abundaban carros último modelo, la ropa de marca y las miradas por encima del hombro. Sin embargo, mientras muchos de los nuestros estaban allí, pidiendo permiso en sus trabajos sometiéndose a descuentos, y pensando como pagar la cuenta del mes si todo se había echado en la bolsa, los hijos de los catequistas podían estar al nivel de cualquiera de los otros niños de padres con dinero.
 
La limosna y los pobres, están fuera de los planes catecúmenos. La mayor parte del dinero que se recoge, en vez de ir para los pobres, va destinado a sufragar los gastos de los llamados catequistas "itinerantes", para que pudieran ir por todo el mundo para establecer más comunidades. Esto suena lindo a la primera, pero al escucharlo más detenidamente uno se da cuenta que estas misiones llevan todos los gastos incluidos, es decir ropa, automóviles, casa e incluso "salarios".


16-Catequistas itinerantes


No sé por qué, pero a mí en particular, ese cuento de los catequistas itinerantes nunca me convenció.

 
Se habla mucho sobre esto, por que al parecer al ir al extranjero a difundir el mensaje evangélico a quien lo ignora, ellos se convierten en mensajeros “casi divinos”. Cuánta gente no hace esto en la selva o en lugares que representan peligros para su vida y ni siquiera se les reconoce el gesto.
 
Estos catequistas itinerantes no son ni la sombra de los misioneros católicos, que recorren el mundo después de haber abandonado todo, o sea, viviendo solos, pobres, expuestos a todo mal, prontos a morir a causa de la fe, obligados por votos a trasladarse a cualquier parte y quedarse allí para siempre. Ellos llevan consigo cónyuge, hijos, por lo que en gran medida se ven apoyados por los afectos familiares. Son asistidos en todo por los hermanos, quedando libres de toda preocupación económica, más o menos mantenidos como turistas y cierto tiempo después pueden volver a su patria.


17-Paternidad responsable


El Camino Neocatecumenal exalta la paternidad optimista de una numerosa descendencia, lo que pareciera que se opone a la doctrina según la cual la paternidad debe ser responsable, que ha sido apoyada incluso por la iglesia católica.
 
Aquí la esposa debe seguir más las directrices del “catequista” que las del esposo y viceversa. El neocatecumenal parece sujeto a su “catequista” común un religioso lo está a su superior respectivo. Y el catequista siempre dirá que se debe estar abierto a la vida.
 
Las parejas del Camino están obligadas a tener los hijos que Dios les dé y ni siquiera pueden utilizar los métodos anticonceptivos naturales. Suelen casarse entre ellos y los que se casan con hombres o mujeres de fuera están obligados a convertirlos. Si no, tienen que abandonar el "paraíso neocatecumenal". Porque la familia es importante, pero Dios lo es más.


18-De decreto a ley


Era muy importante para el Camino que el Vaticano aprobara sus estatutos, sobretodo para Kiko y los suyos, para acabar así con las controversias que llevan más de veinte años sobre esta discutida forma de acercarse a Dios.
 
Pero la obra de Kiko no es tan hermosa como se nos hizo creer. El camino tiene muchas de las características de una secta, lo curioso, es que al ser católicos, no se hable de ellos como tal.
 
Casi todos los catecúmenos, o por lo menos quienes quieren serlo, quieren dar la impresión de que sus grupos son inofensivos, espontáneos, y guiados sólo por el Espíritu de Dios, en cambio, están organizados como una iglesia dentro de la Iglesia. Tienen gente encargada en cada pequeña comunidad, tienen divisiones nacionales y regionales las cuales están secretamente añadidas a las ramas oficiales de la Iglesia
 
El Camino no se libró en sus orígenes de las acusaciones de herejía. Incluso en la actualidad, con sus estatutos aprobados por las correspondientes instancias vaticanas, las críticas que tratan a Kiko como un visionario y a su organización como una secta son frecuentes.


19-Apoyo psicológico


Leyendo bastante, también encontré un documento escrito por el profesor Alberto Picano, que es Psiquiatra en el Hospital San Camilo en Roma, que hablaba sobre su experiencia en apoyos psicológicos a personas que hubiesen participado del Camino Neocatecumenal en Italia.

 
Según él, el problema ni siquiera reposa en Kiko o Carmen, sino en toda la gente que mantiene la creencia sincera y son inconscientes de los asuntos problemáticos que les ha traído pertenecer a una agrupación donde se da este tipo de manipulación.
 
Además, este especialista indica que lo que ocurre en las comunidades es similar a lo que ocurre en los kibbutz Judíos, donde una gran familia acoge todos los miembros de distintas familias y entonces con esta gran familia los distintos roles de padres e hijos se definen.
 
En esta estructura familiar en la comunidad, afloran diferentes patologías como la lucha por el poder, protagonizada principalmente por la figura de los catequistas, quienes quieren manifestar constantemente sus deseos de supremacía y control.
También se crea una desvirtuada idea de la familia normal, donde una pareja se vuelve los padres de la gran comunidad. Lo que puede traer serias deficiencias en la conducta de las parejas que ya existen en el grupo, y cuya autoridad se reduce a los que tienen en mando.
 
Esta comunidad se convierte también en una institución total porque debe resolver todos los problemas de la gente que pertenece a ella, y mantiene que no hay solución posible fuera de la comunidad.
 
De acuerdo al doctor Picano, el tipo de personas que forman una comunidad, es un tipo de gente marginalizada, que no tiene ninguna otra esperanza en su vida; que no se sienten realizados o que ellos son el fracaso. Y como las parroquias no tienen una pastoral para los fracasados, para los marginados, para los que han hecho errores y el Neocatecumenado se fija en la gente que no tiene a nadie que les escuche, estas personas se integran plenamente a la comunidad.
 
El mecanismo que utiliza el camino es hacernos capaces de aceptar nuestra culpa y responsabilidad por nuestros errores frente a Dios, por eso el movimiento existe y tiene éxito.
 
Al preguntársele a Dr. Picano sobre cuáles son algunas de las recurrentes patologías evidentes en gente que ha sido parte de este movimiento, su respuesta fue contundente. Léase bien: “Toda esta gente demuestra una débil personalidad, un sentimiento de fracaso, y una incapacidad para afrontar sus propios errores. Necesitan encerrarse a sí mismos en un sistema rígido privado de comunicación, porque de otra manera no serían capaces de aceptar sus propios errores. Es la más común patología de gente que se auto confina en comunidades, sectas, sistemas dosificados, etc... no aceptan sus propias limitaciones”.
 
Según él, esto puede llevar al abandono individual de toda responsabilidad, donde la persona pierde su libertad, no tiene más poder de discernimiento, no tiene más poder de voluntad y no es consciente de sus propios errores. Lo que da como resultado un individuo debilitado que no tiene moral, ni propósito, ni esperanza, ni capacidad para amar. Esta persona puede tener una completa variedad de enfermedades.
 
De acuerdo a declaraciones del Dr. Picano, aunque desde el punto de vista espiritual, el pecado puede ser visto como un fracaso individual, la connotación que adquieres desde el punto de vista psicológico, es sólo de una mal función psicológica.
 
Por esto, la gente que acaba por ir a estos movimientos son gente que no vive la espiritualidad parroquial, que siente una sed intensa de fe, porque la gente que tiene una fe fuerte no se une al movimiento Neocatecumenal.
 
Porque para cualquiera que tenga necesidad de creer, el encontrase con algo así es el paraíso, ya que te dicen que este es el único camino real para ser cristianos.
Poco a poco se te manipula sin que te des cuenta. Lo más peligrosos, es que los catequistas son capaces de tomar el control de la vida individual de cada persona. Poco a poco se va uno alejando de las personas, actividades y aficiones que lo hacían feliz, y dedica todo el tiempo al camino.
 
Al principio no es muy claro, pero poco a poco se puede oler donde está la trampa. Primero, se inicia con algo tranquilo, asistir a dos reuniones por semana, pero luego esas reuniones se van incrementando.
 
También se aprovechan de los vínculos que se forman entre las personas. Como es natural unos son más simpáticos que otros, pero todos encuentran en amenidad con cierto grupo y van haciendo subgrupitos que a medida que fortalecen su creencia, van acercándose cada vez más.
 
Esto es muchas veces lo más doloroso de dejar el camino. Dejar a esas personas que cayeron en el mismo juego que yo caí, pero que todavía no son capaces de darse cuenta de en lo que están.
 
Ellos se aprovechan plenamente de las dificultades que muchas personas experimentan en el exterior para formar y mantener amistades y hacen que con el pasar de los años no se tengan otros amigos del exterior.
 
Aunque no se vea a simple vista, impulsan iniciativas para dejar caer cualquier interés en cultura, arte, deporte o cualquier afición, porque todo lo demás es secundario, y es todo en el completo sentido de la palabra, porque igualmente el matrimonio de cada uno es controlada por el movimiento. ¿Cuántos catecúmenos deportistas, políticos o artistas reconocidos conoces?
 
Otro aspecto importante, es que los fieles son prácticamente obligados a dejar de participar en el resto de las actividades que se realicen en la parroquia. Siempre insisten en la superioridad de sus actividades, incluso te cuestionan, si prefieres seguir allá, o en el Camino que el señor ha destinado para ti.


20-El punto de llegada


Se dice, y es conocido por algunos, aunque a mí no me consta, que para finalizar el camino, una persona puede tardar de 20 a 30 años y tienen cinco paradas obligatorias: el kerygma, el precatecumenado, el catecumenado postbautismal, la elección y renovación de las promesas bautismales y la llegada al destino final, la familia de Nazareth.

 
Pero esto para qué sirve. ¿Al llegar al final seguro que mi nombre estará escrito en el Libro de la vida?¿Tendré fe? ¿Qué es Kiko hoy que terminó el Camino? ¿Es un santo?¿Llegará al cielo?

21-Algunas cantidades...

Según algunas cifras, que no deben ser de todo exactas, los catecumenales suman más de un millón de fieles, repartidos por 105 países, 16.700 comunidades, 883 diócesis y 4.900 parroquias. También cuentan con 52 seminarios, 731 presbíteros, 63 diáconos, 1.500 seminaristas y algunas universidades (como la San Antonio de Murcia).
 
Su poder económico es incalculable. La Fundación Familia de Nazaret para la Evangelización Itinerante, constituida en Madrid, el 3 de noviembre de 1992, es una fundación que tiene personalidad jurídica propia, que según sus estatutos tienen el fin de organizar el movimiento y sostenerlo económicamente, por medio de la "gestión de oblaciones, contribuciones, donaciones, herencias y legados que le sean conferidos por los fieles de las comunidades neocatecumenales y por otros entes y personas privadas". Eso significa en dinero casi 120 millones de euros anuales sin control alguno y sin abono de los correspondientes impuestos en los paises de los que salen. Y en estos momentos el Euro está valiendo mucho más que le dólar.
 
Con ese dinero pagan a más de mil familias en misión: cada año invitan a unos 150 obispos a encuentros para explicarles el Camino; sostienen sus 46 seminarios (en los que gastan casi 18 millones al año); tienen un centro religioso en Israel, la Domus Galilea, para organizar cursos bíblicos, y centros especiales en Porto San Giorgio (Italia), Lima (Perú) y San Pedro del Pinatar y El Escorial (España). ¿Lo sabían?


Consideraciones finales


Antes que todo quiero explicar que escribí esto pensando en que quienes lo lean serán personas que ya conocen el camino. Pero si hay alguna persona que no lo hecho, puedo decirle que esto no es más que un pequeño mundo del Universo que se vive allí dentro.

 
Si crees que este es el camino que Dios ha elegido para ti y te sientes complacido de pertenecer al él, dale gracias a Dios por ello, sin embrago si te sientes disconforme con él, replantéate que es lo que Dios quiere contigo, si tu salvación está en el camino o no. Muchos olvidan que el camino debe ser un medio para llegar a Dios y no un fin en sí.
 
Para mí ha sido difícil, preparar esto. Igual que para quienes por años han estado dentro de este grupo y les es difícil abandonarlo. Yo por ejemplo, viví eso en carne propia. Uno siente que se aleja de lo único que puede darle un sentido a su vida, y del único lugar donde puede encontrar a Dios. ¡Qué equivocado estuve!
Pero a pesar de que muchos como yo corremos con la suerte de abandonar el camino, y acoplarnos al mundo normal sin problemas, para otros el alejamiento de "paraíso neocatecumenal", tiene graves consecuencias como serios sufrimientos psicológicos.
 
Mucha de esta situación la rige el lazo de dependencia que se crea con los miembros de la Comunidad, quienes conocen los secretos más íntimos y el hecho de que si alguien abandona lo hace con la reprobación general y puede quedar completamente marginalizado por sus antiguos amigos.
 
Espero que Dios escuche mis oraciones. Yo hago esto por que los amo, y quiero compartir mi verdad.Finalizaré diciendo lo que dice el mismo Kiko siempre para concluir sus intervenciones“Recen por mí” y recen por todos aquellos que quieren seguir al señor y a los que no despues de haber pasado por estas experiencias.